martes, 12 de junio de 2012

EL RESPETO



                              
Año de la inclusión nacional y el conocimiento de nuestra diversidad

·       Integrantes: Pablo Albán  Mauricio.
                           Kevin Inga Rumiche.
                    Roberto Smith Campos.
                           John Viera Velásquez.
·       Curso: Ciencia Tecnología y Ambiente.

·     Tema: El respeto

·     Profesora: Laurentina Astutillo Agurto.

·     Grado/sección: 3ero ’’C’’

·     I.E: José Carlos Mariátegui.

2012

El respeto o reconocimiento es la consideración de que alguien o incluso algo tiene un valor por sí mismo y se establece como reciprocidad: respeto mutuo, reconocimiento mutuo. El término se refiere a cuestiones morales y éticas, es utilizado en filosofía política y otras ciencias sociales como la antropología, la sociología y la psicología.[1]
El respeto en las relaciones interpersonales comienza en el individuo, en el reconocimiento del mismo como entidad única[2] que necesita que se comprenda al otro.[3] Consiste en saber valorar los intereses y necesidades de otro individuo en una reunión.[4]

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Principio de respeto o autonomía de las personas
Este principio se basa en dos teorías ético-morales[5] que dicen textualmente:
1.     El respeto por la autonomía del individuo, que se sustenta esencialmente en el respeto de la capacidad que tienen las personas para su autodeterminación en relación con las determinadas opciones individuales de que disponen.
2.     Protección de los individuos con deficiencias o disminución de su autonomía en el que se plantea y exige que todas aquellas personas que sean vulnerables o dependientes resulten debidamente protegidas contra cualquier intención de daño o abuso por otras partes.
Este principio de autonomía sirvió como base de la bioética desde los aspectos sociopolíticos, legales y morales aunque no para garantizar el respeto de las personas en las transacciones médicas.
El respeto como virtud moral
El respeto también puede considerarse como punto medio entre dos extremos vistos por exceso y por defecto.
1.     Por defecto: el miedo, tanto a las personas que le rodean como a objetos o situaciones que afronta el individuo, llevándole a situaciones de imposibilidad a realizar determinados proyectos o metas, tal el caso de los complejos de inferioridad.
2.     Por exceso: el abuso o desmedida de los límites preestablecidos para un correcto orden y trato de las personas o situaciones de cada individuo, lo que lleva a conflictos con los otros como también la imposición de límites y/o normas a fin de superar la crisis del abuso y restablecer el orden de los derechos de cada individuo.
Teoría del reconocimiento
En el campo de la filosofía social y práctica, Honneth está actualmente asociado con el proyecto de revitalizar la teoría crítica por medio de una teoría del reconocimiento o teoría del reconocimiento recíproco, cuyo primer bosquejo fue esbozado en su obra La lucha por el reconocimiento (edición original alemana de 1992, traducción al castellano de 1997). El trabajo de Honneth consiste en articular la dimensión descriptiva de una teoría del reconocimiento con la descripción prescriptiva de una teoría moral. Para ello, se apoya en la premisa antropológica según la cual "el hombre solamente es hombre entre los hombres" (Fichte), es decir que la relación práctica consigo se constituye en una relación con el otro. El reconocimiento fue inicialmente tratado por Hegel en su libro Fenomenología del espíritu.
EL RESPETO
Año de la inclusión nacional y el conocimiento de nuestra diversidad

·       Integrantes: Pablo Albán  Mauricio.
                           Kevin Inga Rumiche.
                    Roberto Smith Campos.
                           John Viera Velásquez.
·       Curso: Ciencia Tecnología y Ambiente.

·     Tema: El acido muriático

·     Profesora: Laurentina Astutillo Agurto.

·     Grado/sección: 3ero ’’C’’

·     I.E: José Carlos Mariátegui.

2012

ACIDO MURIATICO
El acido muriático también llamado:
_ Acido muriático (América).
_ Aguafuerte (España).
_ Salfumant.
_ Espíritu de sal.
_ Ácido de sal.
_ Ácido marino.        
Y su nombre químico es:
Cloruro de hidrógeno
Formula:
 HCl  
Composición química:
El ácido clorhídrico (HCl) se obtiene en el laboratorio por adición de ácido sulfúrico (H2SO4) a sal (NaCl).
La elaboración del acido muriático:
La elaboración utilizada por la industria cloro-álcali, en la cual se electroliza una disolución de sal común (NaCl), produciendo cloro, hidróxido de sodio e hidrógeno. El gas cloro así obtenido puede ser combinado con el gas hidrógeno, formando gas HCl químicamente puro. Ya que la reacción es exotérmica, las instalaciones en las que se realiza son conocidas como horno de HCl.
Usos:
Uso domestico utilizadas principalmente para limpieza.
El ácido clorhídrico se utiliza sobre todo como ácido barato, fuerte y volátil. El uso más conocido es el de desincrustante para eliminar residuos de caliza (carbonato cálcico: CaCO3). En esta aplicación se transforma el carbonato cálcico en cloruro cálcico más soluble y se liberan dióxido de carbono (CO2) y agua:
CaCO3 + 2 HCl → CaCl2 + CO2 + H2O
En química orgánica se aprovecha el ácido clorhídrico a veces en la síntesis de cloruros orgánicos - bien por sustitución de un grupo hidroxilo de un alcohol o por adición del ácido clorhídrico a un alqueno aunque a menudo estas reacciones no transcurren de una manera muy selectiva.
Otra importante aplicación del ácido clorhídrico de alta calidad es en la regeneración de resinas de intercambio iónico. El intercambio catiónico suele utilizarse para eliminar cationes como Na+ y Ca2+ de disoluciones acuosas, produciendo agua demineralizada.
Na+ es reemplazada por H3O+
Ca2+ es reemplazado por 2 H3O+
En la industria alimentaria se utiliza por ejemplo en la producción de la gelatina disolviendo con ella la parte mineral de los huesos.
En metalúrgia a veces se utiliza para disolver la capa de óxido que recubre un metal, previo a procesos como galvanizado, extrusión, u otras técnicas.
También es un producto de partida en la síntesis de policloruro de aluminio o de cloruro férrico (FeCl3):
Fe2O3 + 6 HCl → 2 FeCl3 + 3 H2O

Efectos sobre el organismo:
Ingestión: Puede producir gastritis, quemaduras, gastritis hemorrágica, edema,                     necrosis. 
Inhalación: Puede producir irritación, edema y corrosión del tracto respiratorio,        bronquitis crónica. Se recomienda llevar a la persona a un lugar con aire fresco,   mantenerla caliente y quieta. Si se detiene la respiración practicar reanimación       cardiopulmonar.
Piel: Puede producir quemaduras, úlceras, irritación.
Ojos: Puede producir necrosis en la córnea, inflamación en el ojo, irritación ocular y nasal, úlcera nasal.
Efectos nocivos:
El cloruro de hidrógeno es irritante y corrosivo para cualquier tejido con el que tenga contacto. La exposición breve a bajos niveles produce irritación de la garganta. La exposición a niveles más altos puede producir respiración jadeante, estrechamiento de los bronquiolos, coloración azul de la piel, acumulación de líquido en los pulmones e incluso la muerte. La exposición a niveles aún más altos puede producir hinchazón y espasmos de la garganta y asfixia. Algunas personas pueden sufrir una reacción inflamatoria al cloruro de hidrógeno. Esta condición es conocida como síndrome de malfuncionamiento reactivo de las vías respiratorias (en inglés, RADS), que es un tipo de asma causado por ciertas sustancias irritantes o corrosivas.
La mezcla del ácido con agentes oxidantes de uso común, como la lejía, también llamada lavandina en algunas partes, (hipoclorito de sodio, NaClO) o permanganato de potasio (KMnO4), produce el tóxico gas cloro.
Dependiendo de la concentración, el cloruro de hidrógeno puede producir desde leve irritación hasta quemaduras graves de los ojos y la piel. La exposición prolongada a bajos niveles puede causar problemas respiratorios, irritación de los ojos y la piel y descoloramiento de los dientes.
A pesar de estas características los jugos gástricos en el estómago humano contienen aproximadamente el 3 % de ácido clorhídrico. Allí ayuda a desnaturalizar las proteínas y desempeña un papel importante como coenzima de la pepsina en su digestión. También ayuda en la hidrólisis de los polisacáridos presentes en la comida. Es secretado por las células parietales. Éstas contienen una extensiva red de secreción desde donde se secreta el HCl hacia el lumen del estómago.
Diversos mecanismos previenen el daño del epitelio del tracto digestivo por este ácido:
·            Reguladores negativos de su salida.
·            Una gruesa capa mucosa que cubre al epitelio.
·            Bicarbonato de sodio secretado por las células epiteliales gástricas y el páncreas.
·            La estructura del epitelio.
·            Un abastecimiento sanguíneo adecuado.
·            Prostaglandinas (con múltiples efectos: estimulan las secreciones mucosas y de bicarbonato, mantienen la integridad de la barrera epitelial, permiten el adecuado flujo sanguíneo, estimulan la reparación de las membranas de la mucosa dañadas).
Cuando, por alguna razón, estos mecanismos fallan, se pueden producir pirosis o úlceras. Existen drogas llamadas inhibidores de bombas de protones que previenen que el cuerpo produzca exceso de ácido en el estómago, mientras que los antiácidos pueden neutralizar el ácido existente.
También puede ocurrir que no se produzca suficiente cantidad de ácido clorhídrico en el estómago. Estos cuadros patológicos son conocidos por los términos hipoclorhidria y aclorhidria y pueden conducir a una gastroenteritis.
El ácido clorhídrico en contacto con ciertos metales puede desprender hidrógeno pudiendo formar atmósferas explosivas en el ambiente, esto puede ocurrir por ejemplo cuando se usa en los trabajos de decapado de metales.